La lucha contra la inflación global está llegando a su etapa final.

En la mayoría de las principales economías del mundo, las tasas de interés oficiales son significativamente más altas que la tasa de inflación, lo que significa que hay margen para reducir las tasas de interés...

Los principales bancos centrales de todo el mundo han comenzado a reducir las tasas de interés a medida que la inflación ha caído significativamente en muchos países después de alcanzar un máximo de varias décadas hace dos años. La semana pasada, el Banco Central Europeo (BCE) y el Banco de Canadá (BOC) se convirtieron en los dos primeros bancos centrales del grupo de siete industrias desarrolladas (G7) en recortar las tasas de interés.

Sin embargo, en la reunión ordinaria de política monetaria que tendrá lugar el martes y miércoles de esta semana, se espera que la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) mantenga las tasas de interés sin cambios porque las presiones inflacionarias en Estados Unidos parecen más persistentes que en otras economías importantes. El mercado predice que la Reserva Federal no empezará a bajar los tipos de interés hasta noviembre y que sólo habrá una reducción este año.

La apresurada campaña de subida de tipos de interés que lanzaron los bancos centrales en 2023-2024 ha ralentizado el ritmo de escalada de precios, después de que la inflación siguiera acelerándose como consecuencia de la pandemia de Covid-19 con las cadenas de suministro y debido a la guerra Rusia-Ucrania.

En general, las tasas de inflación en las economías desarrolladas están actualmente bastante cerca del objetivo del 2% del banco central. Sin embargo, los responsables de la política monetaria advierten que el tramo final de la lucha contra la inflación es el más difícil.