ACINQ, una empresa que fabrica Phoenix Wallet, informó que pondrá fin a sus operaciones para clientes estadounidenses debido a requisitos regulatorios inciertos. Phoenix Wallet, una aplicación utilizada por los estadounidenses, dejará de estar disponible en las tiendas iOS y Android a partir del 3 de mayo de 2024, exigiendo la reacción de los clientes y otras personas que tienen sus activos almacenados en la aplicación.

Eliminación de la billetera Phoenix y avisos para el usuario

Esta noticia surge a raíz de los recientes casos de complejidad jurídica que tuvo que atravesar ACINQ y que es el motivo central de este retiro. La compañía ha proporcionado instrucciones específicas que los usuarios deben seguir. Si los usuarios planean no usar su billetera, se supone que deben borrarla con anticipación.

Los anuncios recientes de las autoridades estadounidenses arrojan dudas sobre si los proveedores de billeteras con custodia propia, los proveedores de servicios Lightning o incluso los nodos Lightning podrían considerarse empresas de servicios monetarios y regularse como tales.

– ACINQ (@acinq_co) 26 de abril de 2024

Para usuarios de Android: seleccione Configuración y luego haga clic en "Cerrar canales".

Para usuarios de iOS: elija Configuración y haga clic en la opción "Retirar billetera". Del mismo modo, la billetera del usuario no debe cerrarse seriamente o incluso forzarse porque la transacción en la cadena de bloques generará una tarifa elevada.

Direcciones, leyes e impactos en el modelo de negocio.

El retiro de ACINQ es el resultado de una divulgación regulatoria de EE. UU. que clasifica a los proveedores de billeteras con custodia propia, los proveedores de servicios Lightning y los nodos Lightning como algo así como un negocio de transmisión de dinero. Las incertidumbres regulatorias lastraron a Comunicaciones y decidieron abandonar el mercado estadounidense.

Tras la decisión del consejero delegado, ACING tiene previsto evaluar si la medida influirá en el funcionamiento de la organización. Esta decisión es un acontecimiento fundamental en el mundo de las regulaciones sobre criptomonedas, especialmente en Estados Unidos, que se enfrenta al desafío de evaluar periódicamente los diferentes servicios de criptomonedas.

La fecha de finalización también está estrechamente relacionada con el hecho de que EE. UU. está descubriendo bases legales para desactivar las entidades de criptomonedas. Entre muchas otras actividades que finalmente fueron declaradas ilegales, los fundadores de la aplicación mezcladora de Bitcoin Samourai fueron acusados ​​por el tribunal del Distrito Sur de Nueva York. La acusación dice que estuvieron involucrados en el proceso de mover transacciones de naturaleza ilícita a través de filtración, incluido el lavado de dinero.

La salida de ACINQ refleja el cambiante panorama regulatorio criptográfico

Si bien se abandonó la divulgación, el FBI luego lanzó una serie de advertencias e informó a los usuarios que sus agentes encubiertos estaban siguiendo el crecimiento de las empresas de cifrado no registradas. Esto atestigua nuevos intentos de aplicación de la reglamentación que se acercan a estos operadores multifacéticos que hacen negocios fuera del alcance de las leyes financieras tradicionales.

Esta acción de ACINQ demuestra los obstáculos que los proveedores de servicios de criptomonedas intentan afrontar al regular los regímenes. Esa acción deliberada está estrechamente relacionada con una tendencia general de retomar el escrutinio de los organismos reguladores y las acciones de aplicación de la fracción de criptomonedas, que las autoridades pertinentes intentan manejar en cuestiones de actividad ilegítima y protección del consumidor.

En condiciones regulatorias tan cambiantes, tanto los usuarios como los agentes del mercado deben tomar precauciones continuas y mantenerse al tanto de los desarrollos regulatorios que afectan la accesibilidad y la disponibilidad de los servicios con criptomonedas. La decisión de ACINQ de interrumpir sus operaciones en EE. UU. y desprenderse de su filial estadounidense se convierte en una lección para todos los actores criptográficos del mercado sobre la necesidad de cumplimiento y coherencia regulatoria.