En la industria de las criptomonedas, recaudar fondos se ha vuelto cada vez más difícil debido a un historial de estafas que han dejado a los inversores cautelosos. Un ejemplo reciente es la lucha de un nuevo proyecto criptográfico por conseguir 1,5 millones de dólares en financiación. Dado el alto nivel de escepticismo, los inversores ahora son más cautelosos a la hora de confiar sus ganancias a proyectos con poca o ninguna credibilidad establecida. Esto pone de relieve la necesidad de medidas de transparencia y fomento de la confianza en el espacio criptográfico para fomentar la confianza de los inversores.