Los monjes son compasivos:
El propio maestro conduce un Bentley para evitar que los creyentes sean corrompidos por coches de lujo
El maestro da a luz a sus propios hijos para evitar que las generaciones futuras agobien a los creyentes.
El maestro busca él solo un compañero para evitar que sus seguidores se conviertan en peces gordos.