Cuando experimentamos el gran terremoto el 6 de febrero del año pasado, las dificultades y el dolor que vinieron con ese día fueron como si fuera un mal día que duró años.
Conmemoro con misericordia las vidas que perdimos en este desastre y les deseo un lugar en el cielo. 🙏
Espero que un incidente así nunca nos vuelva a suceder y que nuestro país esté en paz.