El gobierno de Estonia refuerza la regulación de las criptomonedas con un nuevo proyecto de ley con requisitos legales estrictos para los proveedores de servicios de activos digitales. Información según reportes de medios locales.

Estonia endurece la regulación criptográfica

El proyecto de ley es el intento del país de regular la industria de las criptomonedas. Esto ayuda a mejorar la confiabilidad de este sector financiero.

Estonia ya es un lugar importante para los proveedores de servicios de criptomonedas. Se estima que para 2021 la mitad de las empresas de criptomonedas del mundo estarán registradas en el país.

A partir de 2024, la Autoridad de Inteligencia Financiera (Rahapesu Andmebüroo/RAB) ha reducido este número a alrededor de 50. Esto es parte del esfuerzo regulatorio mencionado anteriormente.

El director del RAB, Matis Mäeker, aclaró los próximos cambios. Señaló que las nuevas regulaciones someterán por primera vez a los proveedores a un escrutinio financiero. Estas empresas deben contar con sistemas para gestionar de forma segura los activos de los clientes. Deben tener similitudes con las funciones de los bancos.

Según el nuevo régimen, los proveedores de servicios de criptomonedas serán supervisados ​​por la Autoridad de Supervisión Financiera de Estonia (FSA) o Finantsinspektsioon. Se espera que el programa comience en 2026.

Se espera que las nuevas regulaciones generen reacciones positivas

El nuevo proyecto de ley impone requisitos operativos y de presentación de informes más estrictos a las empresas de criptomonedas. Las multas pueden alcanzar hasta 5 millones de euros. Se trata de un aumento significativo en comparación con el límite de 40.000 EUR establecido por la anterior Ley contra el blanqueo de dinero.

Además, las nuevas regulaciones requerirán que los proveedores de servicios de moneda virtual tengan una licencia. Serán emitidos a partir de 2025 por la FSA. Las entidades que actualmente poseen licencias de UIF deben solicitar una nueva licencia en 2026.

El proyecto de ley proporciona una respuesta a muchos incidentes importantes de robo cibernético y quiebras corporativas en el sector de las criptomonedas en Estonia. Estas cosas han provocado grandes pérdidas para los inversores. El gobierno quiere minimizar este riesgo y garantizar una mayor seguridad para los usuarios.

El nuevo marco regulatorio refleja el compromiso de Estonia de mantener un equilibrio entre la promoción de la innovación financiera y la garantía de la estabilidad del mercado. Ayudando así a proteger parcialmente a los inversores de los riesgos en el feroz mercado.