Según BlockBeats, la confianza del consumidor estadounidense ha subido este noviembre hasta alcanzar su nivel más alto en siete meses, impulsada por el optimismo sobre las condiciones económicas y financieras futuras. La lectura preliminar del índice de confianza del consumidor de la Universidad de Michigan subió a 73, superando el 71 esperado. El índice de expectativas también subió a 78,5, marcando su punto más alto desde mediados de 2021. Esta perspectiva positiva refleja la anticipación de los estadounidenses de una desaceleración de la inflación, ya que los consumidores predicen un aumento del 2,6% en los precios durante el próximo año, el más bajo desde 2020.
Sin embargo, las expectativas de inflación para los próximos 5 a 10 años han aumentado al 3,1%. La encuesta, realizada del 22 de octubre al 4 de noviembre, destaca que los consumidores creen que el futuro de la economía depende del resultado de las elecciones presidenciales. Joanne Hsu, directora de la encuesta, señaló que las políticas económicas de la próxima administración podrían afectar significativamente la inflación, convirtiéndose en una preocupación importante para los consumidores e influyendo en su confianza en el desempeño económico. El índice de expectativas financieras personales ha alcanzado su nivel más alto desde marzo, en parte debido a las mejoras en las situaciones financieras personales. La confianza en las condiciones comerciales a largo plazo también ha aumentado a su punto más alto en casi cuatro años.