Según Cointelegraph, se espera que la inflación global, que ha afectado a los activos de riesgo como las criptomonedas y las acciones tecnológicas, disminuya al 3,5% para fines de 2025, según lo declarado por el Fondo Monetario Internacional (FMI) en su última perspectiva global. El economista jefe del FMI, Pierre-Olivier Gourinchas, destacó que la batalla contra la inflación está llegando a su fin. Después de alcanzar un máximo del 9,4% interanual en el tercer trimestre de 2022, se proyecta que la inflación general caiga al 3,5% para fines del próximo año. Gourinchas señaló que la inflación en la mayoría de los países ahora está cerca de los objetivos de los bancos centrales, y la economía global muestra resiliencia. Se proyecta que el crecimiento se mantendrá estable en el 3,2% en 2024 y 2025. Una inflación más baja podría generar beneficios como la disminución de los costos de vida y las tasas de interés más bajas, lo que podría beneficiar a los activos de riesgo como las criptomonedas. Sin embargo, Gourinchas también señaló que las tensiones geopolíticas y comerciales en Oriente Medio, junto con las próximas elecciones presidenciales en los Estados Unidos, crean una incertidumbre significativa. El informe del FMI pidió un "triple pivote de política" para abordar las tasas de interés, el gasto público y las reformas de productividad. El informe enfatizó que una disminución de la inflación sin desencadenar una recesión global debe verse como un logro importante. No obstante, reconoció que las perspectivas de crecimiento para la economía mundial siguen siendo su nivel más débil en décadas. El FMI pronosticó que es probable que Estados Unidos experimente la tasa de crecimiento más rápida, con fuertes expansiones esperadas en las economías asiáticas emergentes debido a sólidas inversiones en inteligencia artificial. Sin embargo, las perspectivas para otras economías avanzadas, incluidos varios grandes países europeos y algunos mercados emergentes, se redujeron debido a la intensificación de los conflictos globales y los riesgos constantes para los precios de las materias primas. El FMI advirtió que las desaceleraciones proyectadas en los principales mercados emergentes y las economías en desarrollo implican un camino más largo para cerrar las brechas de ingresos entre los países pobres y ricos, lo que podría exacerbar la desigualdad de ingresos dentro de las economías.En contraste con el pronóstico del FMI, el multimillonario gestor de fondos de cobertura Paul Tudor Jones expresó su preocupación por el aumento de la inflación. El 22 de octubre, Jones declaró que tenía una posición larga en Bitcoin, oro y otras materias primas debido a las preocupaciones por la creciente deuda de Estados Unidos. La Oficina de Presupuesto del Congreso estima un déficit federal de 1,9 billones de dólares para el año fiscal 2024, que se prevé que aumente a 2,8 billones de dólares en 2034. Jones sugirió que la inflación para salir de la deuda podría ser la estrategia, citando a Japón como ejemplo. Advirtió que Estados Unidos podría enfrentarse a graves problemas financieros a menos que se aborde el gasto.