A medida que las criptomonedas continúan integrándose en la corriente principal, su influencia se está volviendo cada vez más visible en la cultura popular actual. Desde documentales y música hasta programas de telerrealidad e incluso eventos de música en vivo, 2024 mostró la presencia evolutiva de las criptomonedas de maneras que entretuvieron, educaron y, a veces, desconcertaron a las audiencias.

A continuación se presentan cinco ejemplos notables en los que las criptomonedas dejaron una huella en la cultura pop este año.

Money Electric de HBO lleva Bitcoin al público en general

En octubre de 2024 se estrenó el esperado documental de HBO Money Electric: The Bitcoin Mystery.

Dirigida por Cullen Hoback —quien había trabajado previamente en el misterio de QAnon en 2021— la película se adentró en los orígenes de Bitcoin y la enigmática identidad de su creador seudónimo, Satoshi Nakamoto. Una masiva campaña de hype captó la atención de los medios de comunicación convencionales. ¿Sería esta la película que finalmente resolvería el misterio?

Money Electric. Fuente: HBO

El documental combinó periodismo de investigación con un toque cinematográfico y presentó entrevistas con veteranos de las criptomonedas como Adam Back de Blockstream y Roger “Bitcoin Jesús” Ver, mientras exploraba simultáneamente el ecosistema más amplio de las criptomonedas, especialmente sus enfrentamientos con los reguladores y su integración en los sistemas financieros existentes.

Al final, Hoback propuso una teoría que vinculaba al desarrollador de Bitcoin Peter Todd con Nakamoto, a pesar de que Todd negó rotundamente la afirmación.

Tras su lanzamiento, Money Electric fue elogiada por algunos, pero su afirmación central de que Todd es Satoshi no ganó mucho impulso y la película provocó debates sobre el futuro de Bitcoin y la ética de los métodos de investigación de Hoback. La película también destacó el creciente poder político de los inversores de criptomonedas y su influencia en las elecciones presidenciales de EE. UU. de 2024.

Kendrick Lamar lanza versos sobre Bitcoin en GNX

Kendrick Lamar removió el cesto de criptomonedas con su tema “Wacced Out Murals” de su álbum GNX de 2024. En la canción, Kendrick entrelazó Bitcoin en su narrativa lírica, diciendo:

“Prometiendo transacciones bancarias e incluso Bitcoin.”

La letra parecía señalar a rivales que ofrecían incentivos financieros, incluyendo Bitcoin, para ganar influencia. Esto parecía ser un guiño al desdén del artista por las tácticas manipulativas a menudo empleadas por los artistas de hoy.

Aunque sutil, la mención fue una incursión notable para Bitcoin en el vernacular del hip hop, sirviendo como una metáfora de poder y riqueza. El comentario de Kendrick no solo resonó con sus fanáticos, sino que también reavivó las discusiones sobre el creciente papel de Bitcoin en el paradigma cultural actual.

El hecho de que artistas como Kendrick y Drake (quien usó Bitcoin para apuestas en el pasado) estén incorporando criptomonedas en sus narrativas ha destacado el impacto de la moneda en la cultura mainstream.

La serie de conciertos “America Loves Crypto” se apodera de los estados clave

En la antesala de las elecciones presidenciales de EE. UU. de 2024, Stand With Crypto —una iniciativa política lanzada por Coinbase— llevó a cabo la serie de conciertos “America Loves Crypto” para generar apoyo a candidatos que propongan políticas amigables con las criptomonedas.

Uno de los eventos destacados de la noche fue la electrizante actuación de Black Keys, que duró 45 minutos y cubrió 11 de los éxitos más icónicos de la banda. La serie también presentó a artistas como Big Sean y The Chainsmokers, fusionando entretenimiento con defensa política.

The Black Keys tocando en la iniciativa Stand With Crypto Fuente: Cleveland.com

El concierto gratuito ofreció comida, bebidas y beneficios VIP a los asistentes que descargaron una billetera digital y reclamaron un NFT. Mientras que la sección VIP creó una atmósfera íntima para los fanáticos, la configuración también entrelazó las criptomonedas en cada aspecto del evento, desde la venta de entradas hasta experiencias exclusivas.

Al reunir dos ámbitos aparentemente dispares —la defensa de las criptomonedas y la cultura pop— America Loves Crypto simbolizó cómo los eventos de renombre pueden ayudar a dar forma a la percepción pública y las políticas.

Las criptomonedas tienen su propio Shark Tank con Killer Whales

El año 2024 también presentó a Killer Whales, un programa de telerrealidad que combinaba el drama de las presentaciones de startups con la innovación Web3. Producida por Hello Labs y transmitida en plataformas como Apple TV y Amazon Prime, la serie muestra a emprendedores de criptomonedas presentando sus proyectos ante un panel de expertos de la industria, incluidos Anthony Scaramucci e influencer de redes sociales Mario Nawfal.

A diferencia de los tradicionales shows de pitch, Killer Whales no se trataba de invertir dinero, sino de enfocarse en la mentoría y la exposición para startups de criptomonedas. Los proyectos que obtuvieron votos de “nadar” del panel pudieron acceder a un paquete de acelerador de marketing de CoinMarketCap valorado en hasta $100,000.

La mezcla de perspicacia empresarial y drama personal de la serie parecía captar una amplia audiencia que abarca desde entusiastas de las criptomonedas hasta fanáticos de la telerrealidad. También proporcionó una rara plataforma para educar a los espectadores convencionales sobre tecnologías blockchain y conceptos clave de criptomonedas como la tokenómica.

Biggest Heist Ever de Netflix explora a Bonnie y Clyde de Bitcoin

El verdadero crimen se encontró con las criptomonedas en Biggest Heist Ever de Netflix, un documental que narra el infame hackeo de Bitfinex en 2016. La película examinó las vidas de Heather “Razzlekhan” Morgan e Ilya “Dutch” Lichtenstein, la excéntrica pareja acusada de lavar miles de millones en Bitcoin robado.

Sus peculiares travesuras, incluidos los vergonzosos videos de rap temáticos de criptomonedas de Razzlekhan, convirtieron la historia en una sensación de internet.

Además, el documental examinó las complejidades técnicas del hackeo mientras se adentraba en las extrañas vidas personales de la pareja. Entrevistas con expertos en ciberseguridad, exasociados y funcionarios de la ley pintaron un vívido cuadro de cómo se desarrolló el robo y sus ramificaciones para el ecosistema de criptomonedas.

Biggest Heist Ever también planteó nuevas preguntas sobre la seguridad nacional, particularmente en relación con los supuestos vínculos de Lichtenstein con Rusia. La mezcla de suspenso, humor y un verdadero robo digital hizo que la película fuera una entrada destacada en el género, solidificando el lugar de las criptomonedas en la fascinación de la cultura pop por el crimen y la intriga.