Un inversor a largo plazo debe adherirse a sus propias reglas de inversión

1. Estar vivo es lo más importante, siempre hay que proteger el capital.

2. Solo Dios sabe lo que sucederá mañana, solo se debe ganar el dividendo que otorgan las tendencias de los ciclos alcistas y bajistas.

3. No arriesgarse a comer la cabeza y la cola del pez. Quien compra es un aprendiz, quien vende es el maestro. Aprender a reducir los propios deseos, saber cuándo retirarse y estar contento es la verdadera felicidad.