En un desarrollo significativo para los inversores en criptomonedas, el Servicio de Impuestos Internos (IRS) ha declarado oficialmente que las recompensas obtenidas del staking de criptomonedas están sujetas a imposición. Este anuncio se produce en el contexto de una demanda en curso presentada por Joshua Jarrett, un inversor en criptomonedas que está impugnando la postura del IRS sobre la clasificación fiscal de las recompensas por staking.

La aclaración del IRS, reportada recientemente por Bloomberg, afirma que las recompensas por staking deben ser gravadas como ingresos en el momento en que se reciben. Esta posición contradice el argumento de Jarrett de que estas recompensas deben ser consideradas como propiedad recién creada y, por lo tanto, no imponible hasta que se vendan. La disputa legal, iniciada en octubre de 2024, podría tener implicaciones de gran alcance sobre cómo se regula y se grava el staking de criptomonedas en los Estados Unidos.

Explicación de la Imposición de Recompensas por Staking

Según el IRS, las personas que participan en el staking de criptomonedas obtienen tanto “dominio como control” sobre las recompensas que ganan, lo que califica estas recompensas como ingresos imponibles bajo las leyes fiscales actuales. La agencia hace referencia a la Resolución de Ingresos 2023-14, que exige que los contribuyentes informen el valor de mercado justo de sus recompensas por staking como ingresos brutos en el año en que acceden a ellas.

El proceso de staking implica bloquear activos de criptomonedas existentes para apoyar operaciones de la red, como la verificación de transacciones. A cambio, los participantes reciben tokens adicionales como recompensas. El IRS sostiene que estos tokens representan ingresos imponibles inmediatos en lugar de nueva propiedad.

Antecedentes Legales e Implicaciones

La demanda de Jarrett no es su primer encuentro con el IRS sobre este tema. Anteriormente, presentó una queja relacionada con los impuestos sobre los tokens de Tezos ganados a través del staking en 2019. Aunque se le otorgó un reembolso por impuestos pagados en exceso, decidió no aceptarlo, buscando en cambio una decisión definitiva sobre las implicaciones más amplias de la imposición del staking.

Su actual desafío legal tiene como objetivo anular la decisión del IRS sobre las recompensas por staking, argumentando que solo deben ser gravadas en el momento de la venta o transferencia real. Jarrett establece paralelismos entre las recompensas por staking y otras formas de propiedad recién creada, como cultivos o manuscritos, que no son gravadas hasta que se venden.

El resultado de este caso podría remodelar la política fiscal de EE. UU. respecto al staking de criptomonedas e influir en cómo se manejan casos similares en el futuro. A medida que el mercado de criptomonedas continúa creciendo, con Bitcoin superando recientemente los $100,000 por primera vez, el escrutinio regulatorio se está intensificando.

Esta batalla legal destaca los debates en curso dentro de la comunidad cripto sobre la imposición y la regulación, mientras los actores navegan por un panorama en evolución marcado por la rápida innovación y el creciente control gubernamental. La resolución de la demanda de Jarrett será observada de cerca tanto por inversores como por reguladores, estableciendo potencialmente un precedente sobre cómo se tratan las actividades de staking bajo la ley fiscal de EE. UU.