El Salvador acordó cambiar su estrategia con respecto al bitcoin tras un acuerdo de préstamo de 1.400 millones de dólares con el Fondo Monetario Internacional (FMI). Como parte del acuerdo, el país hará que la aceptación del bitcoin sea voluntaria para los comerciantes y restringirá la participación del sector público en actividades relacionadas con el bitcoin.
Aceptación voluntaria de Bitcoin por parte de comerciantes
Estas medidas tienen como objetivo aliviar la carga de la deuda del país y, al mismo tiempo, minimizar los posibles riesgos asociados a la volatilidad del bitcóin. El FMI lleva mucho tiempo siendo escéptico respecto de la decisión de El Salvador de adoptar el bitcóin como moneda de curso legal, destacando los riesgos asociados a su naturaleza especulativa.
Bajo el nuevo acuerdo, El Salvador desmantelará gradualmente su participación con Chivo, la billetera de criptomonedas respaldada por el estado. Si bien el papel del gobierno en las transacciones relacionadas con Bitcoin será limitado, el país continuará acumulando Bitcoin. Un portavoz de la Oficina Nacional de Bitcoin confirmó que El Salvador planea seguir comprando un Bitcoin por día, sin planes de vender sus tenencias existentes. Actualmente, El Salvador posee alrededor de 5,969 BTC, que valen aproximadamente 602 millones de dólares. A pesar del cambio en la política, el compromiso del país con Bitcoin sigue siendo una parte central de su estrategia económica a largo plazo.
Negociaciones con el FMI
Este cambio se produce después de una serie de negociaciones con el FMI, que han durado cuatro años. Las preocupaciones del FMI sobre la adopción de Bitcoin por parte del país han sido bien documentadas, con el prestamista global temiendo que la naturaleza especulativa de la criptomoneda podría exponer a la nación a la inestabilidad financiera.
Como parte del nuevo acuerdo de préstamo, se espera que El Salvador se concentre en estabilizar su economía, lo que incluye una reducción en su ratio de deuda a PIB. El préstamo de 1.4 mil millones de dólares se distribuirá en 40 meses y es parte de un paquete financiero más amplio que también involucrará apoyo adicional de otros bancos internacionales, incluido el Banco Mundial.
A pesar de la presión del FMI para una reevaluación del papel de Bitcoin en la economía de El Salvador, el defensor y asesor de Bitcoin Max Keiser desestimó la crítica. Argumentó que la adopción de Bitcoin en El Salvador siempre había sido voluntaria y que su uso continúa creciendo. En contraste, una encuesta reciente reveló que la mayoría de los salvadoreños—92%—no usan Bitcoin para transacciones, lo que resalta aún más los desafíos de la adopción generalizada.
El experimento de Bitcoin de El Salvador, que comenzó en 2021, sigue siendo un tema controvertido, pero con el acuerdo del FMI en marcha, la estrategia financiera del país parece estar evolucionando para asegurar su estabilidad económica a largo plazo.
La publicación El Salvador reducirá la adopción de Bitcoin a cambio de un préstamo del FMI de 1.4 mil millones de dólares apareció primero en TheCoinrise.com.