$BNB En 1956, durante la Guerra Fría, se descubrió una de las operaciones de espionaje más emocionantes de la historia, la Operación Overcast, dirigida por la Unión Soviética. Los soviéticos reclutaron a un científico estadounidense de alto rango que trabajaba en el proyecto de la bomba nuclear americana, como parte de una operación de espionaje muy sofisticada.

Este científico, Klaus Fuchs, pudo transmitir secretos altamente sensibles sobre el diseño de la bomba de hidrógeno a los soviéticos. Gracias a esta información, la Unión Soviética pudo llevar a cabo su primera prueba exitosa de su bomba nuclear en 1949, años antes de lo que Occidente había esperado.

Este avance cambió completamente el equilibrio global de poder y condujo a una carrera armamentista nuclear entre Estados Unidos y la Unión Soviética, que amenazó la paz mundial durante años.

Lo que es aún más emocionante es que Fuchs no fue descubierto hasta principios de la década de 1950, lo que significa que los secretos nucleares habían estado filtrándose durante años sin el conocimiento de Estados Unidos, ¡y todo esto estaba sucediendo tras bambalinas en el corazón del proyecto más secreto de América!

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