Recientemente, una ola de proyectos de bots de Telegram ha abierto la puerta a muchos lanzamientos aéreos inexplorados, fáciles y divertidos. ¿El objetivo final? Hacer que la experiencia Web3 sea accesible para todos e incorporar a los usuarios de Web2 a la Web3. Desafortunadamente, las cosas rápidamente se convirtieron en un caos y Hamster Kombat surgió como el ejemplo perfecto de esta estafa.

Hamster Kombat no es el único proyecto que se enfrenta a una reacción masiva. Los proyectos que no cumplen las expectativas de los usuarios suelen convertirse en blanco de críticas. Pero Hamster Kombat se destaca en un aspecto clave: la magnitud de la manipulación y la cantidad de usuarios involucrados.

El bombo publicitario

Cuando se anunció por primera vez Hamster Kombat, parecía un juego de clics más de Telegram. Sin embargo, el equipo lo diseñó y lo comercializó tan bien que atrajo una atención masiva. En tan solo unas semanas, Hamster Kombat incluso superó a Bitcoin en popularidad en Google Trends, con un aumento masivo en el tráfico de búsqueda.

Esta es solo una parte de la historia. Hamster Kombat se convirtió en una de las plataformas tecnológicas de más rápido crecimiento, con 150 millones de usuarios incorporados. Hasta la fecha, más de 300 millones de direcciones han interactuado con el juego a través de la miniaplicación de Telegram. Curiosamente, esta moneda también está generando más revuelo que Hamster Kombat

El revuelo fue tan grande que ni siquiera las noticias bajistas del mercado pudieron frenarlo. Los YouTubers aprovecharon la oportunidad, e incluso los influencers no relacionados con las criptomonedas publicaron sobre el proyecto. Algunos creadores se dedicaron específicamente a las actualizaciones diarias de Hamster Kombat y a las predicciones de precios, y ahí es donde comenzaron los verdaderos problemas.

La manipulación

La manipulación comenzó en cuanto las masas acudieron en masa al juego. Los influencers no solo vendían predicciones de precios o actualizaciones diarias, sino que vendían sueños. La gente empezó a soñar con que Hamster Kombat llegara a valer entre 1 y 5 dólares, y la manipulación no hizo más que crecer.

Todo era un juego psicológico. La mayoría de los usuarios de Hamster Kombat eran participantes nuevos de Web3 y tenían poca o ninguna comprensión de cómo funcionan los proyectos o cómo se determinan los precios. En cambio, confiaban en los influencers y creían en sus predicciones de precios. También se predice que esta moneda se multiplicará por 5 este mes

En muchos países del sur de Asia, Hamster Kombat se convirtió en un sueño. Los influencers de las redes sociales vendieron ciegamente este sueño a sus seguidores, quienes creyeron cada palabra. Era inevitable que el 90% de los usuarios se sintieran decepcionados después del anuncio del airdrop, ya que el proyecto simplemente no pudo cumplir con sus expectativas poco realistas. Puedes crear tus propias Memecoins en menos de 5 minutos

Los manipuladores convencieron fácilmente al 90% de la base de usuarios con estas promesas infladas, lo que generó falsas esperanzas de que el proyecto nunca se cumpliría. El precio se estableció antes del Evento de Generación de Tokens (TGE, por sus siglas en inglés) y la gente creyó en un sueño, y ahí es donde realmente comenzó la estafa.

La estafa

Las expectativas sobre Hamster Kombat eran altísimas, y muchos afirmaban que era el próximo Shiba Inu o PEPE, donde los usuarios podrían ganar 1.000 dólares y escapar de la pobreza. La mayoría de los 300 millones de usuarios de Hamster Kombat eran recién llegados a la Web3, muchos de los cuales carecían incluso de un conocimiento básico de conceptos criptográficos como FDV (valoración totalmente diluida) y suministro de tokens.

Estos usuarios, influenciados por expectativas poco realistas, trabajaron duro para cumplir un sueño que no entendían. Pero después del TGE y el airdrop, esos sueños se desmoronaron rápidamente, como era de esperar. Millones de personas quedaron decepcionadas y sus expectativas infladas del mundo de las criptomonedas se desvanecieron.

De repente, el proyecto fue catalogado como un esquema Ponzi. Los influencers comenzaron a afirmar que Hamster Kombat era una estafa, no porque fuera intrínsecamente deshonesto, sino porque no cumplía con las expectativas imposibles que se habían vendido a las masas.

Las lecciones

Las expectativas son algo delicado y se vuelven peligrosas cuando no son realistas. El 90 % de los usuarios de Hamster Kombat que se sintieron estafados simplemente no estaban preparados para la realidad. La incorporación a Web3 no debería preparar a las personas para el fracaso. Las criptomonedas y Web3 no se tratan solo de recompensas. El próximo gran revuelo después de Hamster Kombat

Los usuarios deben comprender la tokenómica antes de comenzar a quejarse de los precios de las cotizaciones. Incluso si Hamster Kombat debutara con un precio de $1, sería más valioso que Solana o USDT, pero la mayoría de los poseedores de airdrops igualmente estarían decepcionados.

Si eres nuevo en el mundo de las criptomonedas, seguir esta ruta para incorporarte a la Web3 puede no ser una buena idea. Sí, hay recompensas, pero a menudo requieren más que unos pocos toques y algunas tareas sin sentido. La Web3 es un mundo emocionante y en evolución, pero este tipo de proyectos solo dan un mal ejemplo a los recién llegados.