En enero de 2024, fui víctima de una estafa en línea. Los estafadores me pidieron 12 USDT para venderme un programa supuestamente raro. No estaba familiarizado con USDT ni con el proceso de transferencia de dinero mediante la red Tron o criptomonedas.
Después de realizar una investigación exhaustiva, descubrí Binance, una plataforma de trading de buena reputación. Creé una cuenta, compré 12 USDT y, lamentablemente, se los envié a los estafadores. Aunque la cantidad era pequeña, me sirvió como catalizador para adentrarme más en el mundo del trading y la inversión en criptomonedas.
Este pequeño revés finalmente me abrió los ojos y cambió mi forma de pensar. Hoy estoy operando con criptomonedas con éxito y generando ganancias sustanciales. Como dijo James Dyson, "El fracaso es simplemente un retraso en el éxito".$BTC $ARB $GALA