Donald Trump ha anunciado que si pierde las elecciones del 5 de noviembre, no volverá a postularse a la presidencia en 2028.

“Eso será todo”, dijo Trump durante una entrevista en el programa “Full Measure” de Sharyl Attkisson el domingo.

“No, no lo veo en absoluto. Ojalá tengamos éxito”.

Trump anunció oficialmente su última candidatura a la Casa Blanca hace dos años, en noviembre de 2022.

Estas elecciones son una carrera reñida entre él y Kamala Harris. Las encuestas actuales muestran que están empatados en los estados clave.

Aunque Harris ha ganado recientemente algo de terreno en las encuestas a nivel nacional, la contienda sigue demasiado reñida como para predecir un ganador.

Trump todavía está lidiando con las consecuencias de su derrota electoral de 2020, que sigue atribuyendo a lo que llama un “fraude electoral generalizado”.

A pesar de numerosos desafíos legales y recuentos, no se ha presentado ninguna evidencia real que respalde sus afirmaciones.

Y ahora enfrenta cargos penales federales y estatales por sus intentos de anular los resultados de 2020.

Él mantiene su inocencia y presenta estas acusaciones como ataques con motivaciones políticas para descarrilar su campaña.

Mientras tanto, Harris se ha presentado como la candidata que puede abordar problemas cotidianos como los gastos familiares y la vivienda.

Los datos de las encuestas muestran que tiene una ventaja de cinco puntos sobre Trump, 49% frente a 44%. La preferencia de los demócratas ha aumentado en 16 puntos desde que Biden se fue.

Según la encuesta de NBC News, ahora se la considera más competente, eficaz y física y mentalmente apta para la presidencia.

Éstas son áreas en las que Trump solía tener una ventaja cuando se enfrentaba a Biden.

Harris también es vista como la candidata que puede hacer que el país vuelva a encarrilarse porque los votantes creen abrumadoramente que las cosas van en la dirección equivocada.

Pero Trump sigue estando por delante en términos de la economía en general. Las preocupaciones económicas son la principal preocupación de los votantes, y dos tercios de ellos afirman que sus ingresos familiares no están a la altura del costo de vida.

La encuesta de NBC News también muestra que parte del apoyo a Trump ha muerto entre los republicanos que sólo lo apoyaban por falta de una mejor opción.

Éstos son los votantes que lo apoyaron a regañadientes en 2016 y 2020, pero que podrían dudar esta vez.

Trump habló sobre la dificultad de regresar después de una pausa, diciendo:

“Habría sido más fácil si lo hubiera hecho… contiguo. El beneficio es más que nada, demuestra lo malos que eran”.