El Tribunal Supremo de Taiwán condenó a ocho personas por espionaje para China y reveló que se utilizaron criptomonedas para facilitar los pagos en uno de los casos de espionaje más destacados de los últimos años.
Bloomberg informa, citando a la Oficina de Investigación del Ministerio de Justicia de Taiwán, que la inteligencia china utilizó criptomonedas para pagar al personal militar taiwanés involucrado en un importante caso de espionaje.
Según el informe, el Tribunal Supremo de Taiwán ha condenado a ocho personas, incluidos oficiales militares en activo y retirados, por recopilar secretos de Estado en nombre de China, lo que el informe describe como “uno de los mayores casos de espionaje en años”. El informe no aclara qué criptomoneda se utilizó para los pagos o si un proveedor externo facilitó las transacciones.
El tribunal dictó sentencias que van desde un año y medio hasta 13 años de prisión. La Oficina de Investigación del Ministerio de Justicia reveló que estos individuos fueron reclutados por el Partido Comunista Chino para recopilar inteligencia militar, utilizando “moneda virtual” para facilitar los pagos. A pesar de la prohibición del comercio de criptomonedas en China, este caso pone de relieve el uso continuo de activos digitales por parte de las agencias de inteligencia para operaciones encubiertas.
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China muestra interés en las criptomonedas para espionaje
China prohibió todas las transacciones con criptomonedas en 2021, alegando motivos de estabilidad financiera y prevención del delito. Sin embargo, el uso de criptomonedas en el último caso de espionaje indica que los agentes de inteligencia chinos siguen aprovechando el anonimato y la facilidad de las transacciones transfronterizas que ofrecen los activos digitales.
Como reveló anteriormente el Departamento de Justicia de Estados Unidos, los agentes de inteligencia chinos pagaron sobornos en Bitcoin (BTC) a un empleado del gobierno estadounidense para robar documentos relacionados con el procesamiento de una empresa de telecomunicaciones con sede en China, que se cree que es Huawei. En ese caso, los agentes chinos utilizaron Bitcoin, y los análisis de blockchain revelaron que los espías utilizaron herramientas de mejora de la privacidad como Wasabi Wallet para ocultar su rastro de transacciones.
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