Según BlockBeats, Nick Timiraos, a menudo llamado el "portavoz de la Reserva Federal", informó el 19 de diciembre que se ha producido un cambio en la percepción de los riesgos de inflación entre los funcionarios de la Reserva Federal. En septiembre, de 19 funcionarios, tres creían que los riesgos para la previsión de inflación básica del gasto de consumo personal (PCE) estaban sesgados al alza, lo que sugiere que, si las previsiones eran incorrectas, podrían ser demasiado bajas.

Hoy, el sentimiento ha cambiado significativamente, y 15 de los 19 funcionarios ahora expresan su preocupación por el hecho de que los riesgos asociados con la inflación básica del PCE, ya revisada al alza, siguen estando sesgados al alza. Esto indica que hay un creciente consenso dentro de la Reserva Federal de que las presiones inflacionarias podrían ser más persistentes de lo que se había anticipado anteriormente. La inflación básica del PCE es una medida crítica para la Reserva Federal, ya que excluye los precios volátiles de los alimentos y la energía, lo que proporciona un panorama más claro de las tendencias inflacionarias subyacentes.

El cambio en la perspectiva de los funcionarios de la Reserva Federal refleja las incertidumbres económicas actuales y los desafíos que implica pronosticar con precisión la inflación en un entorno económico dinámico. La creciente preocupación por los riesgos inflacionarios sugiere que la Reserva Federal podría tener que considerar nuevos ajustes a su política monetaria para abordar las posibles presiones inflacionarias. Este cambio es crucial, ya que podría influir en las futuras decisiones sobre las tasas de interés y afectar el crecimiento económico y la estabilidad.