🚧 ¿Alguien ha sido testigo de primera mano del caos de ayer? En caso de que te lo hayas perdido, el jueves por la noche, CrowdStrike, una importante empresa de ciberseguridad, desató accidentalmente el caos con una actualización de software defectuosa. Este percance provocó que los sistemas basados ​​en Microsoft fallaran, lo que provocó que oficinas gubernamentales, bancos y aerolíneas mostraran la infame pantalla azul de la muerte.

Fue una perturbación masiva.

Pero aquí está la parte interesante: Bitcoin no se vio afectado en absoluto. Dado que depende de marcos basados ​​en Linux en lugar de software de Microsoft, sus operaciones continuaron sin problemas. Mientras los bancos y otros sistemas centralizados luchaban, los mineros de Bitcoin seguían avanzando.

Si bien cualquier sistema operativo puede enfrentar contratiempos, la naturaleza descentralizada de Bitcoin garantiza que ningún punto de falla pueda interrumpir toda la red.

Es sólo otra razón para apreciar la infraestructura detrás de las criptomonedas.