Según CoinDesk, un artículo reciente publicado por la Oficina de Investigación Financiera del Departamento del Tesoro de Estados Unidos sugiere que las inversiones en criptomonedas pueden haber permitido a los estadounidenses de bajos ingresos comprar viviendas a un ritmo mayor que la población general. El estudio destaca un aumento significativo de la actividad hipotecaria en áreas con un alto nivel de participación en activos digitales. A pesar de las preocupaciones sobre los posibles riesgos financieros, la investigación indica que las tasas de morosidad en estas regiones siguen siendo bajas.
El informe revela que los consumidores de bajos ingresos en áreas con una exposición sustancial a las criptomonedas tienen más probabilidades de obtener hipotecas, y el tamaño promedio de las hipotecas es notablemente grande en comparación con los niveles de ingresos anteriores a 2020. Los hallazgos sugieren que no hay evidencia significativa de un aumento de la angustia financiera en la deuda hipotecaria, automotriz o de tarjetas de crédito entre los consumidores de estos vecindarios. De hecho, las tasas de morosidad son relativamente bajas, lo que podría respaldar el argumento a favor de una adopción más amplia de las criptomonedas en Estados Unidos.
Sin embargo, la Oficina de Investigación Financiera (OFR) advierte que los hogares con una exposición significativa a las criptomonedas deben ser monitoreados de cerca durante las crisis financieras para evaluar los posibles riesgos para el mercado hipotecario estadounidense. Las criptomonedas siguen siendo volátiles en comparación con otras clases de activos, y el informe enfatiza la importancia de monitorear el aumento de los saldos de deuda y el apalancamiento entre los hogares de bajos ingresos con exposición a las criptomonedas. El aumento de la angustia en este grupo podría plantear desafíos financieros futuros, en particular si se concentra en instituciones de importancia sistémica.
Los datos de la OFR indican un aumento del 274% en las hipotecas en áreas de bajos ingresos y con alto uso de criptomonedas entre 2020 y 2024, con saldos hipotecarios promedio superiores a los de las zonas de bajos ingresos con menor actividad de activos digitales e incluso superiores a los de las áreas de ingresos medios. El estudio sugiere que las ventas de criptomonedas pueden haber facilitado el acceso a hipotecas más grandes a través de mayores pagos iniciales.
La investigación utilizó datos fiscales de EE. UU. para identificar las concentraciones de criptomonedas, y los últimos datos disponibles son de 2021. Este período probablemente coincidió con el pico del mercado de criptomonedas antes de su caída de 2022, lo que resultó en ganancias significativas para los inversores. Según se informa, estas ganancias se utilizaron para respaldar otros esfuerzos financieros, incluidas compras sustanciales de casas y automóviles. Sin embargo, los datos crediticios de la OFR son tan recientes como este año.