Ningún inversor real está aquí vendiendo mentiras y mentiras, excepto aquellos que dependen de manipuladores de precios para conseguir cambios. No es de extrañar que todos estén extremadamente emocionados cuando ven que los precios caen con la esperanza de que cause pérdidas irreversibles a los inversores que han invertido el dinero que tanto les costó ganar en criptomonedas.

Ustedes, muchachos, son simplemente patéticos.