En un caso histórico, dos hombres fueron sentenciados por manipular el precio de la criptomoneda de Hydrogen Technology, HYDRO, lo que marca la primera vez que un jurado de juicio penal federal clasifica una criptomoneda como un valor y considera la manipulación de precios como un fraude de valores.

El cofundador y director ejecutivo de Hydrogen Technology, Michael Kane, y el jefe de ingeniería financiera de la compañía, Shane Hampton, fueron declarados culpables de reclutar a la empresa sudafricana Moonwalkers Trading Limited para inflar artificialmente el precio de HYDRO utilizando un robot de comercio automatizado.

Desde octubre de 2018 hasta abril de 2019, se realizaron aproximadamente $7 millones en "negocios de lavado" y más de $300 millones en "negocios falsos", engañando a los inversores minoristas para que compraran HYDRO a precios inflados. El plan resultó en una ganancia de aproximadamente 2 millones de dólares para los conspiradores durante diez meses.

Kane y Hampton fueron declarados culpables de conspiración para cometer manipulación de precios de valores y fraude electrónico, Kane recibió una sentencia de tres años y nueve meses de prisión y Hampton fue sentenciado a dos años y 11 meses. Este caso sirve como un precedente importante en la regulación de las criptomonedas y su clasificación como valor según la ley federal.