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Honestamente, cuando descubrí que Ahmed Shadid es el dueño del proyecto, comencé a pensarlo dos veces y a dar un paso atrás. Conozco a Ahmed Shadid desde 2016 o 2017 y, según mis experiencias y observaciones a lo largo de los años, su reputación y posición en la industria no me tranquilizan. Su trayectoria y las decisiones que ha tomado en el pasado me han generado algunas preocupaciones. Esto me ha hecho más cauteloso a la hora de seguir adelante con cualquier participación en su proyecto.