Los datos recientes sobre la inflación de Estados Unidos en marzo dieron un duro golpe a cualquier esperanza persistente de un pronto recorte de tasas por parte de la Reserva Federal. Este hecho es un duro golpe para los demócratas, ya que las altas tasas de interés podrían perjudicar el sentimiento de los votantes independientemente de cómo crezca la economía estadounidense.

Fuente: OFICINA DE ESTADÍSTICAS LABORALES DE EE.UU.

Los mercados de futuros se habían mostrado ligeramente optimistas, insinuando uno o posiblemente dos recortes de tipos a finales de este año. Sin embargo, la política monetaria podría dar un giro inesperado. El economista Larry Summers sugiere que hay entre un 15 y un 25 por ciento de posibilidades de que las tasas realmente suban. Summers también bromeó sobre su nueva barba, que podía afeitarse de una sola vez, posiblemente reflejando sus esperanzas de una solución simple a problemas económicos complejos.

Tendencias de la inflación y sus implicaciones políticas

Las tasas de inflación básica de marzo, cruciales para medir la estabilidad económica, se han desviado del objetivo y ahora se sitúan en el 3,8 por ciento, casi el doble del objetivo de la Reserva Federal. El presidente de la Reserva Federal, Jay Powell, enfrenta un escenario difícil, ya que las posibles políticas económicas de una futura administración Trump podrían agitar aún más la inflación a través de medidas como deportaciones masivas y nuevos aranceles. Irónicamente, unos pocos recortes de tipos podrían ayudar a Biden en las próximas elecciones al aliviar la presión económica, aunque la Reserva Federal mantiene firmemente su postura no partidista.

A pesar de algunos avances económicos, el estadounidense común y corriente siente la presión. Puede que la inflación se haya enfriado desde hace dos años y se haya evitado una recesión, pero eso es poco consuelo para quienes no pueden pagar su propia casa, todavía viven con sus padres o están hacinados en espacios compartidos. Tasas de interés más bajas mejorarían directamente su situación, pero las preocupaciones más amplias sobre el futuro de la democracia bajo una posible presidencia de Trump no resuenan entre la mayoría de los votantes, descartados como alarmistas.

Las encuestas reflejan esta desconexión. Una encuesta reciente del Financial Times-Michigan Ross muestra una preferencia por Trump sobre Biden en cuestiones económicas en diversos grupos demográficos, independientemente de un repunte de la economía. Las cuestiones del aborto y la inmigración también influyen en las preferencias de los votantes, y Trump gana en inmigración, un factor crítico para muchos votantes.

Fuente: Previsiones económicas e incertidumbres del Financial Times.

Las funestas predicciones del año pasado sobre una recesión han resultado infundadas. Inicialmente, los economistas esperaban múltiples recortes de tasas este año, una cifra que se reduciría drásticamente con el tiempo. Ahora, las expectativas de recortes de tasas han tocado fondo, lo que indica que los pronósticos económicos siguen siendo muy impredecibles.

En un blog en vivo de economía de Investopedia, se señaló que aunque la confianza del consumidor cayó ligeramente, la inflación sigue siendo una preocupación importante, con la oferta monetaria como un indicador revelador. Kim Caughey Forrest, de Bokeh Capital Partners, destacó que el dinero en circulación, que ascendió a 2,34 billones de dólares en marzo, proporciona información sobre las posibles tendencias de la inflación.

Susan M. Collins, de la Reserva Federal de Boston, comentó que el camino hacia el objetivo de inflación del 2% es más largo de lo esperado, sugiriendo que los recortes de tipos podrían retrasarse. Si bien sigue siendo optimista sobre una eventual reducción de las tasas, admite que el momento es incierto y depende de la evolución de los datos económicos.