#Assets Después de la muerte de una persona, se puede acceder a sus criptoactivos y distribuirlos de acuerdo con su plan patrimonial. Por lo general, esto implica nombrar beneficiarios en un testamento o establecer un fideicomiso que incluya instrucciones para administrar y distribuir los activos. Es crucial garantizar que los seres queridos sepan cómo acceder y administrar estos activos después del fallecimiento de la persona. Además, almacenar contraseñas y claves de acceso de forma segura y compartirlas con personas de confianza o mediante un ejecutor digital confiable puede facilitar el proceso.