La aprobación de los ETF de Bitcoin el 11 de enero de 2024 marca un momento crucial en el mercado de criptomonedas. A diferencia de los ciclos anteriores, en los que los aumentos de precios llevaron a un aumento de las reservas de divisas, ya que los inversores anticiparon las ventas, las tendencias actuales muestran una disminución de las reservas incluso cuando el precio de Bitcoin aumenta. Esto indica una creciente demanda por parte de los inversores institucionales que mantienen Bitcoin a largo plazo, facilitada por la introducción de los ETF. Con la oferta fija de Bitcoin y la disminución de la disponibilidad en las bolsas, este escenario sugiere el potencial de un aumento de precios más sostenido y significativo en comparación con los ciclos anteriores, lo que destaca la evolución del estado de Bitcoin como un activo escaso en las carteras institucionales.