El gobierno federal de Estados Unidos está intensificando sus esfuerzos regulatorios en el espacio de las criptomonedas, implementando regulaciones más estrictas contra el lavado de dinero (AML) y el conocimiento del cliente (KYC). Si bien están diseñadas para prevenir actividades ilícitas, la mayoría de estas regulaciones han aumentado la liquidez del mercado y la innovación hacia jurisdicciones más favorables a las criptomonedas.
Estados Unidos ha asumido un papel de liderazgo en el avance de la tecnología y la adopción de criptomonedas; ciudades como California, San Francisco, Nueva York y Miami han surgido como centros de actividades criptográficas, donde reuniones y convenciones unen a especialistas, inversores y mentes creativas de diversos rincones del mundo.
Sin embargo, navegar por el entorno regulatorio en los Estados Unidos puede ser bastante complejo debido a las reglas establecidas por cada estado. Las empresas que se aventuran en la industria de las criptomonedas a menudo se encuentran con este obstáculo.
La carga regulatoria puede provocar que la liquidez se aleje de las sedes estadounidenses
Las demandas regulatorias están aumentando para los intercambios de criptomonedas a medida que las agencias del gobierno de EE. UU. hacen cumplir las reglas AML y KYC, lo que resulta en mayores gastos de cumplimiento para las empresas con sede en el país y lleva a algunas a buscar entornos regulatorios más amigables en otros lugares.
Si bien la mayoría cree que las nuevas regulaciones han afectado a las bolsas offshore, está claro que las bolsas onshore enfrentan la mayor presión regulatoria. En consecuencia, las bolsas offshore han experimentado un aumento de la demanda y muchas están aceptando el acceso offshore.
En el último trimestre, las transacciones en plataformas nativas offshore fueron mayores que los volúmenes de transacciones combinados de las bolsas reguladas onshore desarrolladas y nuevas.
Según un informe de Acuiti, la demanda de exchanges offshore aumentó al 49%, mientras que la demanda de exchanges onshore se quedó ligeramente atrás con un 41%. La demanda de DeFi fue del 8%, mientras que los nuevos exchanges onshore tuvieron un grupo de demanda de apenas el 3%.
Las jurisdicciones que favorecen las criptomonedas están cobrando importancia
Países como Suiza, Malta y El Salvador se han convertido en centros de desarrollo de las criptomonedas. Ofrecen regulaciones más flexibles que respaldan la tecnología blockchain y el crecimiento de las finanzas digitales que regulaciones estrictas como las de los EE. UU.
Estos países están atrayendo liquidez con beneficios fiscales y procedimientos de licencias más sencillos, junto con proyectos blockchain apoyados por el gobierno.
Por ejemplo, Singapur se ha ganado la reputación de ser un centro financiero global y su enfoque hacia las criptomonedas es amigable. La Autoridad Monetaria de Singapur (MAS) ha creado un marco regulatorio claro que permite a los inversores institucionales y minoristas operar con criptomonedas de manera segura. Esto ha convertido a Singapur en un lugar privilegiado para las empresas emergentes de criptomonedas y la investigación de blockchain.