Una de las pocas cosas que puedes controlar y que puede cambiar tu vida 🧬

Pensar. Desempeña un papel importante en la configuración de tu mentalidad. Es como estudiar tus acciones y emociones; no es exactamente una introspección, pero se acerca. Tus pensamientos cambian constantemente; los pensamientos matutinos son diferentes a los vespertinos. Es un proceso fluido que mantiene activo tu cerebro.

Puedes controlar tu pensamiento en función de lo que haces, escuchas o ves. Tu mente reacciona de la misma manera hasta que cambias lo que consumes: nuevas acciones, nuevos estímulos, nuevos resultados.

Concéntrate en las acciones que desencadenan el pensamiento que quieres mantener. Una vez que estás en ese camino, tienes el control, ordenas lo que haces y cómo lo haces".

Rutina: tienes 24 horas, como todos los demás. No se trata de tiempo, se trata de rutina. Si no estás haciendo un seguimiento de cuándo hacer qué, te estás perdiendo algo. La cita dice: "Toma decisiones en el momento adecuado". Pero las decisiones surgen de las acciones. Sin acciones, no hay disciplina, no hay hábitos, no hay decisiones. La rutina es imprescindible.

Acciones: tu pensamiento impulsa tus acciones. Una vez que has hecho un seguimiento de tu rutina, sabes cuándo y en qué actuar. No hay progreso sin acción. Positiva o negativa, toma acción. Es la única forma de aprender qué funciona y qué no. Mantén lo que funciona, desecha lo que no.

Disciplina: una vez que hayas dominado la rutina y las acciones, tu mente comienza a estructurarse. Apégate a ella y verás: los malos hábitos desaparecerán. Comenzarás a cuestionar tus acciones pasadas, dándote cuenta de lo que fue un desperdicio. Eso es Cómo evolucionas, cómo cambia tu personalidad con el tiempo.

Es simple: planifícalo y hazlo.