Según Odaily, en la madrugada del 4 de diciembre, un número significativo de miembros del parlamento surcoreano se reunieron en la Asamblea Nacional. La sesión, en la que estuvieron presentes más de la mitad de los legisladores, se centró en una resolución crucial. Si la mayoría de los miembros está de acuerdo, el Parlamento surcoreano está dispuesto a aprobar una resolución que pide el levantamiento de la ley marcial.

La decisión de convocar esta sesión se produce en medio de crecientes discusiones y debates en el panorama político de Corea del Sur. El posible levantamiento de la ley marcial es una medida importante, que refleja la evolución del clima político y la respuesta del gobierno a los problemas nacionales actuales. El resultado de esta sesión podría tener consecuencias sustanciales para la gobernanza y las libertades civiles del país.

A medida que avanza la sesión, todas las miradas están puestas en el parlamento para ver si la resolución se aprueba. La decisión no solo afectará el entorno político inmediato, sino que también sentará un precedente para futuras acciones legislativas en Corea del Sur. La comunidad internacional también está siguiendo de cerca la situación, dadas sus posibles ramificaciones en la estabilidad regional y las relaciones diplomáticas.