La senadora estadounidense Marsha Blackburn anunció el martes que su campaña de reelección ha comenzado a aceptar donaciones criptográficas, lo que indica la creciente aceptación de esta clase de activos en la política estadounidense.

La página de recaudación de fondos de Blackburn indica que su campaña actualmente acepta donaciones en criptomonedas, incluidas Bitcoin (BTC), Ether (ETH), Dogecoin (DOGE) y Litecoin (LTC), impulsadas por el proveedor de criptopagos BitPay.

"Nuestra campaña está comprometida a reunirse con los partidarios donde estén", dijo Blackburn en una publicación de X el 9 de julio. "A medida que un número creciente de estadounidenses utilizan monedas digitales para las transacciones diarias, ¡estamos entusiasmados de comenzar a aceptar donaciones criptográficas!"

Las criptomonedas son ahora una fuerza política

La aceptación de las donaciones criptográficas por parte del senador republicano es parte de una tendencia más amplia de adopción de las criptomonedas entre los políticos. El presunto candidato presidencial republicano, Donald Trump, comenzó a aceptar donaciones en criptomonedas en mayo. Desde entonces, Trump ha redoblado su apuesta y ha pedido que se desarrolle una industria minera nacional de Bitcoin en Estados Unidos. Por si acaso, también prometió conmutar la sentencia de cadena perpetua del fundador de Silk Road, Ross Ulbricht.

Podría decirse que las criptomonedas han surgido como un tema de campaña genuino, con Trump posicionándose como el candidato criptográfico y prometiendo proteger a Bitcoin de la hostilidad del actual demócrata Joe Biden.

Esto se produce después de un período en el que la Comisión de Bolsa y Valores (SEC) de Biden ha investigado activamente a varias empresas de cifrado en una ofensiva que definió una era.  Además, el imprudente veto de Biden a una resolución para revocar las controvertidas directrices contables de la SEC podría tener graves ramificaciones políticas para él en las elecciones de noviembre.

Muchos expertos de la industria creen que la postura anti-criptomoneda de Biden en realidad podría costarle las próximas elecciones presidenciales. 

Dicho esto, quienquiera que preste juramento como presidente en enero de 2025, ya sea Biden o el ex presidente Trump, estará en una posición crucial para definir el estado de las criptomonedas en Estados Unidos.