En una medida controvertida, Celsius está emprendiendo acciones legales para recuperar 100 millones de dólares de los usuarios que retiraron fondos justo antes de que la empresa se declarara en quiebra. La demanda está dirigida a miles de antiguos usuarios, lo que genera importantes preocupaciones y debates dentro de la comunidad criptográfica.

Fondo

Celsius, una destacada plataforma de criptopréstamos, se declaró en quiebra en 2022 en medio de un entorno de mercado turbulento. Mientras la empresa navega por su reestructuración financiera, ahora tiene como objetivo recuperar los fondos retirados por los usuarios en los 90 días anteriores a la declaración de quiebra. Este período, a menudo denominado “período preferencial”, permite a las empresas recuperar potencialmente los pagos realizados poco antes de la quiebra si se consideran preferenciales.

La batalla legal

La demanda tiene como objetivo “recuperar” estos fondos, argumentando que los retiros realizados durante este período crítico beneficiaron injustamente a algunos usuarios sobre otros. Celsius no solo busca las cantidades retiradas, sino que también está presionando para que estos fondos se valoren a las tasas de mercado del 14 de junio de 2024, lo que podría aumentar significativamente la cantidad adeudada por los usuarios dadas las fluctuaciones en los valores de las criptomonedas desde 2022.

Impacto en los usuarios

Para muchos antiguos usuarios de Celsius, esta medida supone una sorpresa. La decisión de la plataforma de buscar estos fondos podría generar cargas financieras sustanciales, particularmente porque las tasas de mercado de las criptomonedas han variado mucho en los últimos dos años. La posibilidad de tener que devolver fondos a los valores de mercado más altos de hoy aumenta la complejidad y la posible tensión financiera para los afectados.

Reacción de la comunidad

La reacción dentro de la comunidad de criptomonedas ha sido mixta. Algunos ven las acciones de Celsius como un paso necesario para garantizar un trato justo a todos los acreedores en los procedimientos de quiebra. Otros lo ven como un intento agresivo e injusto de penalizar a los usuarios que actuaron en su mejor interés durante un momento de incertidumbre.