El título de este artículo en construcción que entregaré en las próximas horas y que he querido adelantarles por temor a que puedan caer presas de un trampa 🪤 será una necesaria reflexión y una crítica profunda y metafórica sobre la naturaleza del mercado financiero y la vulnerabilidad de los inversores. Utilizando la imagen de un roedor atrapado en una trampa, ilustrare cómo el mercado puede ser engañoso y peligroso, especialmente para aquellos que se acercan con demasiada confianza. También hago una comparación con eventos históricos, como las guerras mundiales, para subrayar la inevitabilidad de las crisis y la importancia de estar preparados a lo que parece ser una inevitable tormenta.

Creo que es necesario transmitir la idea de que el mercado es impredecible y, a menudo, despiadado. Aconsejo a los inversores ser cautelosos y estratégicos en estos días en que el viejo, cruel y despiadado mercado se ha estado mostrando dadivoso, les invito a no dejarse llevar por la aparente generosidad del mercado. La historia tiende a repetirse y es crucial aprender de ella para no caer en las mismas trampas.

El mercado siempre se tiñe de rojo, algunas veces sangra hasta morir. Esten atentos.

Jorge Ferrer

Licenciado en Administración de empresas