Era el año 2020, trabajábamos para una empresa de apuestas que no tenía todas las licencias al día, afiliabamos personas a la plataforma y nos daban un % de los beneficios. Ese año aprendimos todo el tema de las criptomonedas, buscando una alternativa para cobrar nuestras comisiones, y estaba por comprar mi primer bitcoin a $9000. Aunque nos habíamos asesorado por la actividad que realizamos, no había marco regulatorio en contra, por lo tanto nos decían que podíamos trabajar tranquilos. Me hacía mucha ilusión poder comprar 1 bitcoin, se hablaba que iba a romper los 20.000, que podía llegar a 40.000.
El fiscal nos baja prisión preventiva dejándome fuera del sueño. Me tocó ver desde la cárcel en los noticieros como BTC llegaba a los $50.000.
10 meses después nos dan la libertad, pero nos habían decomisado todo. Nos quedamos sin nada. Ver a bitcoin en 69k genero una depresión inmensa, quien sabe cuánto pude haber acumulado en todo ese año, 2, 3 o 4 BTC. Me hubiera cambiado la vida.
En la cárcel me tocó compartir pabellón con la gente de ONE COIN, una famosa cripto que nunca llegó a ningún exchange pero fue uno de los más grandes movimientos criptos a nivel mundial. Estuvo catalogado como un ponzi. De esos muchachos aprendí mucho de criptomonedas, blockchain, etc.
Todo mi proceso en prisión me sirvió para convertirme en un activista cripto. Hoy en día enseño de manera gratuita a las personas a introducirse en el mundo cripto, para que logren cumplir sus objetivos personales, apalancandose y capitalizandose gracias a las criptomonedas.
Mi historia es trágica, no fui una mala persona, no me merecía lo que me pasó, trabaje para terminar con las estafas que había en el juego online en argentina que jamás estuvo regulado y por eso nos fue tan bien.
Quebrado y depresivo, sobreviví estos años como pude, espero ahora poder dar el salto con este ciclo alcista, con lo poco que pude acumular, para continuar con mis emprendimientos.
Gracias por leer este post, fue muy liberador escribirlo, siento angustia cada vez que me acuerdo por lo que tuve que pasar, sin poder defendernos, como si fueramos criminales y lo único que hicimos fue terminar con las estafas, que la gente que ganaba en el juego, cobrara lo que ganó.