Ripple, la compañía detrás del token XRP, se encuentra actualmente en una disputa legal con la Comisión de Bolsa y Valores de EE. UU. (SEC). La SEC acusa a Ripple de realizar una oferta de valores no registrados mediante la venta de su token XRP y solicita una multa de 2 mil millones de dólares. Sin embargo, el director jurídico de Ripple, Stuart Alderoty, sostiene que la multa no debería exceder los 10 millones de dólares.

Los abogados de Ripple reiteraron recientemente esta postura, comparando el caso con la demanda de la SEC contra Terraform Labs, una empresa de criptografía desaparecida que acordó pagar una multa de 4.470 millones de dólares por actividad fraudulenta. Los abogados argumentan que la SEC acordó previamente que las sanciones civiles deberían oscilar entre el 0,6% y el 1,8% de los ingresos brutos del acusado y, por lo tanto, una multa "apropiada" para Ripple no sería más de 10 millones de dólares.

A pesar de la batalla legal en curso, el director ejecutivo de Ripple, Brad Garlinghouse, es optimista acerca de una resolución para el verano de 2024. Sin embargo, el complejo proceso legal podría provocar retrasos. El resultado del caso podría afectar significativamente el precio de XRP, que ha reaccionado positivamente a las victorias judiciales parciales de Ripple en el pasado.