En una declaración reciente, el candidato presidencial republicano Donald Trump expresó su deseo de que todo el Bitcoin restante se extraiga en los Estados Unidos. Él cree que este movimiento estratégico contribuiría significativamente al objetivo del país de convertirse en un país con dominio energético. Esta declaración refleja el creciente reconocimiento del potencial de Bitcoin para dar forma a las políticas económicas y energéticas. Sin embargo, también plantea dudas sobre las implicaciones ambientales de la minería de Bitcoin, dado su alto consumo de energía. El impacto en el mercado criptográfico en general y las posibles implicaciones regulatorias de esta medida aún están por verse.