Ya nadie colecciona sellos
Ya nadie vende nueces
Ya nadie apuesta por el jade
Ya nadie colecciona cuentas Dzi
Ya nadie tiene mastines tibetanos
Nadie compró la caligrafía y la pintura.
Ya nadie aprecia la secoya
Ya nadie usa relojes de lujo
Ya nadie quiere marfil
Ya nadie persigue las monedas antiguas.
Nadie compra diamantes
Ya nadie está volteando la casa
espera espera espera. . . . . .
Sólo el gran pastel ha estado cargando espinas hasta alcanzar nuevos máximos una y otra vez.
Después de leer esto, ¿qué piensas? !