¡Un granjero irlandés llamado Tom Campbell ha descubierto una forma única de utilizar la abundante energía que produce su granja lechera para la minería de Bitcoin! Un productor de leche del condado de Armagh, en Irlanda del Norte, desarrolla energía renovable mediante digestión anaeróbica.
La digestión anaeróbica es un proceso natural que descompone la materia orgánica en biogás y digestato rico en nutrientes en ausencia de oxígeno. El biogás producido mediante digestión anaeróbica se quema para producir vapor que impulsa una turbina y genera electricidad.
Tom Campbell utiliza la mayor parte de la electricidad producida para hacer funcionar su granja. Sin embargo, en un escenario con un exceso de energía que no se puede transferir a la red, el agricultor la utiliza para extraer Bitcoin. Su granja genera casi 700 kW de electricidad, que abastecen a aproximadamente 12.000 hogares.
Para 2030, el gobierno irlandés prevé haber reducido las emisiones de gases de efecto invernadero en un 25%. La industria agrícola de Irlanda es un importante contribuyente a estas emisiones y produce más del 35% de estas emisiones. Los estudios demuestran que las vacas desempeñan un papel importante en la generación de emisiones de gases de efecto invernadero. Irlanda tiene alrededor de 7,3 millones de vacas y su gobierno está trabajando activamente para gestionar los desechos de estas vacas de manera ecológica.
Si el 41% de las granjas del país adoptan la digestión anaeróbica, existe la posibilidad de que todos los hogares de Irlanda reciban suficiente electricidad. Teniendo en cuenta la economía de Irlanda, la extraña idea de Campbell es ingeniosa. Los mineros de Bitcoin pueden utilizar abundante energía cuando la demanda de la red es baja. El agricultor puede beneficiarse de la minería de Bitcoin vendiendo el exceso de electricidad renovable a la red eléctrica.
¿Cuál es el impacto de la minería de Bitcoin en el medio ambiente?
La minería de Bitcoin es un proceso que consume mucha energía y que implica la resolución de problemas matemáticos complejos mediante el uso de hardware especializado (ASIC) que requiere cantidades significativas de electricidad para funcionar.
Este consumo de energía ha generado preocupaciones sobre el impacto ambiental de la minería de Bitcoin, particularmente porque el valor y la popularidad de la criptomoneda continúan creciendo.
Según algunas estimaciones, la minería de Bitcoin representa aproximadamente el 0,5% del consumo mundial de electricidad, aproximadamente el equivalente al consumo de electricidad de Argentina. Como tal, el consumo de energía asociado con la minería de Bitcoin tiene un impacto ambiental significativo, contribuyendo a las emisiones de gases de efecto invernadero y otras formas de contaminación del aire.
Tom Campell consideró, de forma intencionada o no, el impacto negativo de la minería de Bitcoin en el medio ambiente, y empezó a utilizar el exceso de energía para la actividad. Minar Bitcoin utilizando el exceso de energía es una buena idea para disminuir el lado negativo de la actividad.
