¡Comida para el pensamiento!
Si los bancos y los gobiernos pueden imprimir cantidades ilimitadas de riqueza, ¿de qué sirve multarnos como castigo?
¡Comida para el pensamiento!
Si los bancos y los gobiernos pueden imprimir cantidades ilimitadas de riqueza, ¿de qué sirve multarnos como castigo?