Según Odaily, Matthew Sigel, director de investigación de activos digitales en VanEck, ha criticado la reciente perspectiva del Tesoro de Estados Unidos sobre los activos digitales, argumentando que su oposición a las monedas estables se basa en puntos de vista académicos obsoletos. Sigel señaló que el Tesoro se basa en un estudio de Gary Gorton y Jeffery Zhang para justificar su preferencia por un sistema financiero centralizado. Argumentó que el análisis histórico centrado en Estados Unidos del estudio promueve una "narrativa circular" de que el dinero privado es inherentemente inestable, lo que cree que es engañoso.

Sigel destacó que la evidencia histórica de otros países muestra que el dinero privado no conduce automáticamente a la inestabilidad. Con los controles y contrapesos adecuados, las monedas privadas pueden ser tan confiables como el dinero emitido por el gobierno. Cabe destacar que el documento del Tesoro evaluó positivamente la representación de activos reales en la cadena de bloques (tokenización) y sugirió que las monedas estables y la tokenización podrían remodelar el panorama financiero.

Sin embargo, el informe también advirtió sobre los posibles riesgos para la estabilidad asociados con las monedas estables, sugiriendo que sin regulación, su creciente dependencia de los bonos del Tesoro de Estados Unidos podría plantear riesgos. Sigel respondió que las monedas estables han demostrado el potencial de operar de manera segura bajo marcos regulatorios globales apropiados. Destacó que las monedas estables modernas, con datos en tiempo real y transacciones transparentes, difieren significativamente de los entornos caóticos del pasado, lo que hace que las viejas cuestiones sean irrelevantes.

Sigel concluyó pidiendo una revisión global más amplia. Cree que para comprender el potencial de las monedas estables y las monedas digitales privadas es necesario ir más allá de una perspectiva exclusiva de Estados Unidos y aprovechar las experiencias financieras internacionales. Además, instó a los reguladores estadounidenses a adoptar un punto de vista más inclusivo que refleje la naturaleza interconectada de la economía digital global.