Según Odaily, los mercados bursátiles europeos registraron un ligero descenso el martes, poniendo fin a una racha de cinco días de ganancias. La caída se debió principalmente a las pérdidas en el sector energético, que eclipsaron el optimismo reciente sobre posibles recortes de las tasas de interés por parte de la Reserva Federal. El índice paneuropeo STOXX 600 cayó un 0,5%, afectado por una caída de los precios del petróleo que afectó a las acciones energéticas, así como por una caída de las acciones bancarias. El índice DAX de Alemania también disminuyó un 0,3%, marcando el final de su racha de ganancias más larga desde 2014. A principios de este mes, los activos de riesgo globales enfrentaron reveses debido a las preocupaciones de los inversores sobre una desaceleración de la economía estadounidense, y las acciones de alta valoración, particularmente en el sector tecnológico, se vieron significativamente afectadas. En Europa, los sectores más defensivos, como las telecomunicaciones y las acciones de atención médica, experimentaron un repunte, lo que ayudó a la recuperación del índice STOXX 600 y lo posicionó para un posible máximo histórico. Michael Field, estratega de mercados europeos de Morningstar, comentó: "En términos generales, es saludable que los mercados experimenten pequeñas caídas ocasionales, ya que sirve como recordatorio de que los mercados no son una escalera mecánica; no solo suben".