La Oficina de Impuestos de Australia (ATO) vigilará de cerca a las personas que retiren sus ganancias criptográficas antes de que finalice el año financiero, informó ChainCatcher. El director general de Koinly, Adam Saville-Brown, dijo que la ATO ha estado prestando mucha atención al criptoespacio en los últimos años.

La ATO ha revisado sus procedimientos de comparación de datos criptográficos, con el objetivo de recopilar datos de todos los intercambios criptográficos que operaron legalmente en Australia desde 2014 hasta 2026. La ATO espera que el plan recopile información sobre 1,2 millones de inversores en criptomonedas cada año, incluidos nombres, direcciones, correos electrónicos e incluso cuentas de redes sociales y direcciones IP. La mayoría de los usuarios australianos de criptomonedas son conscientes de sus obligaciones de presentación de impuestos, pero el plan "puede atrapar a los pocos inversores restantes que no cumplan".