Según Foresight News, el ex ejecutivo de IcomTech Marco Ruiz Ochoa se declaró culpable de su papel en un esquema Ponzi de criptomonedas y admitió un cargo de conspiración para cometer fraude electrónico, que conlleva una sentencia máxima de 20 años de prisión.
IcomTech era una de las llamadas empresas de minería y comercio de criptomonedas que prometía ganancias a los inversores a cambio de la compra de "productos de inversión relacionados con las criptomonedas". Marco Ruiz Ochoa y otros prometieron generar ganancias a partir de las operaciones mineras y de comercio de criptomonedas de la compañía, generando retornos diarios. Los fiscales declararon que el negocio de minería y comercio de criptomonedas de IcomTech no existía y que los fondos de los inversores se utilizaban para otros planes y gastos personales.