El estadounidense Eric Finman aprendió por primera vez sobre el dinero digital durante una protesta en Washington, a la que asistió con su hermano. Al ver a un tipo con una camiseta de Bitcoin, le preguntó qué era Bitcoin.

"Eso es lo que va a acabar con Wall Street", le dijo su hermano.

En 2011, a la edad de 12 años, Eric compró monedas por valor de 1.000 dólares, utilizando todo el dinero que le había dado su abuela. En ese momento, el tipo de cambio era de sólo 10 dólares por bitcoin.

Durante los siguientes 3 años, Eric simplemente estudió e hizo algo de comercio de monedas. A la edad de 15 años, Finman dejó la escuela y discutió con sus padres. El chico dijo que si gana $1 millón antes de los 18 años, no irá a la universidad ni estudiará más.

Inmediatamente, Eric vendió parte de los bitcoins y recibió 100.000 dólares. Invirtió el dinero que ganó en su primer negocio, que puso en marcha en su propia habitación. A Finman no le gustaba tanto su escuela que decidió iniciar su propia empresa educativa, Botangle. En él, los profesores impartían clases de forma remota a través de video chat. Después de 2 años, Eric vendió su negocio por 300 Bitcoins.

Cuando el precio de Bitcoin superó los 2,7 mil dólares, Finman, de 17 años, se convirtió oficialmente en millonario. Ganó la discusión con sus padres y, en lugar de ir a la universidad, empezó a viajar por el mundo.

En 2025, Eric tiene un capital de 8 cifras, invierte dinero activamente en proyectos energéticos técnicos innovadores y también sueña con enviar su propia "cápsula del tiempo" a la luna.