El juez de la Corte Suprema del Estado de Nueva York, Juan Merchan, anunció el día 3 que emitirá un fallo el 10 de enero de 2025 sobre el caso de 'dinero para silenciar' relacionado con el presidente electo Trump. Este caso involucra el pago de dinero para silenciar a la actriz de cine para adultos Stormy Daniels durante las elecciones presidenciales de 2016 para evitar que ella revelara su relación privada con Trump. Este caso se ha convertido en un punto clave entre los muchos desafíos legales que enfrenta Trump.

Trump ha respondido de manera contundente a la inminente decisión, publicando continuamente en las redes sociales para expresar su descontento. Se autodenomina el único político en la historia de Estados Unidos que no puede defenderse a sí mismo, cuestionando la legalidad y la equidad del caso. También ha acusado al juez Merchan de ser 'corrupto e deshonesto', exigiendo la revocación de su certificación profesional. Mientras tanto, Trump continúa quejándose del trato injusto que ha recibido, afirmando que nunca ha habido un presidente que haya sufrido un 'trato ilegal' como él, y acusa a los jueces y fiscales demócratas de tratarlo de manera 'sin precedentes' injusta.

El caso que enfrenta Trump no solo está relacionado con su destino legal, sino que también podría afectar su capacidad para asumir el cargo sin problemas. Según los informes, Trump podría presentarse en persona o a través de video remoto. Sin embargo, el mayor enfoque de este juicio es si Trump se convertirá en el primer presidente en funciones en la historia de Estados Unidos en ser condenado por un caso penal. El juez Merchan ha indicado que, considerando factores reales como el privilegio presidencial, Trump podría no ser encarcelado, pero es muy probable que enfrente otras formas de consecuencias legales, incluyendo una condena pública por sus acciones.

A pesar de que Trump podría apelar para tratar de anular el fallo, si finalmente falla en su apelación, asumirá la presidencia con un cargo penal, lo que representará un momento histórico que tendrá un profundo impacto en la política y el sistema legal de Estados Unidos. El resultado de este caso no solo determinará si Trump puede asumir el cargo sin problemas el 20 de enero de 2025, sino que también podría convertirse en un evento político sin precedentes en la historia de Estados Unidos.