Según BlockBeats, el 1 de enero, el fundador de Cardano, Charles Hoskinson, dijo que en sus 10 años de contribución al ecosistema nunca se había desviado de la hoja de ruta original. Con el lanzamiento de la bifurcación dura de Chang, Cardano ahora está en manos de los miembros de la comunidad. Por lo tanto, confirmó que su último «deber es eliminar cualquier obstáculo a esta transición, y que absolutamente nadie o nada interrumpirá este proceso».
Además, una de las cosas más importantes para hacer funcionar la Era de Voltaire es la aprobación del presupuesto y los estatutos. A pesar de la urgencia, una fuente informada acusó a la fundación Cardano de retrasar el proceso de aprobación. Sin embargo, Hoskinson afirmó que estos dos planes deben ser aprobados el próximo año.
Él dijo que supervisará la realización de este objetivo, «sin importar las consecuencias para las personas, la economía o la profesión». Se muestra optimista de que la comunidad podrá decidir realmente el futuro de Cardano pronto, y que al final estos sacrificios valdrán la pena.