Se espera que las tensiones de larga data entre el presidente electo Donald Trump y el presidente de la Reserva Federal, Jay Powell, vuelvan a cobrar protagonismo en 2025, y las políticas económicas y la dinámica institucional prepararán el escenario para posibles enfrentamientos.
Donald Trump, reelegido en noviembre de 2024, critica con frecuencia a Powell, lo que plantea interrogantes sobre cómo podría evolucionar la relación entre la Casa Blanca y la Reserva Federal en el próximo año.
A lo largo de 2024, Trump atacó públicamente el liderazgo de Powell, argumentando que el presidente debería tener mayor influencia sobre las decisiones de la Reserva Federal. Durante la campaña electoral, Trump afirmó que Powell se había "equivocado mucho" y sugirió que su administración podría reexaminar la independencia de la Reserva Federal.
El gasto de la Reserva Federal bajo el microscopio
Tras la reelección de Trump, Powell desestimó enérgicamente los rumores de que lo destituirían de su cargo, enfatizando su intención de cumplir su mandato, que expira en mayo de 2026. Sin embargo, incluso si Powell conserva su puesto, los analistas esperan que se reaviven las fricciones entre la administración y la Fed.
El presidente electo ha nombrado al empresario multimillonario Elon Musk y al empresario Vivek Ramaswamy para dirigir el Departamento de Eficiencia Gubernamental (D.O.GE). El dúo se ha comprometido a revisar el gasto federal y sus planes podrían incluir cambios significativos en la Reserva Federal.
Recientemente Musk calificó a la Reserva Federal de “absurdamente excedente de personal” en su plataforma de redes sociales X, insinuando posibles reducciones de fuerza laboral.
La Reserva Federal tiene un exceso absurdo de personal
— Kekius Maximus (@elonmusk) 23 de diciembre de 2024
Según un informe de Yahoo Finance, la Reserva Federal emplea aproximadamente a 24.000 personas en todo Estados Unidos, y el 86% de su fuerza laboral trabaja en bancos de reserva regionales.
La sede central en Washington, D.C., alberga a unos 3.000 empleados. A diferencia de la mayoría de las agencias federales, la Reserva Federal opera independientemente de la financiación de los contribuyentes y se financia a través de los ingresos generados por los títulos públicos.
A pesar de su independencia, los críticos no consideran que los gastos operativos de la Fed sean insignificantes. En 2024, sus gastos operativos netos se presupuestaron en 7.100 millones de dólares, aproximadamente el 0,1% del presupuesto total del gobierno federal. Históricamente, la Fed ha enviado el exceso de ingresos al Tesoro de Estados Unidos, transfiriendo casi un billón de dólares entre 2012 y 2021.
Las políticas económicas de Trump chocan con el plan de la Fed
Trump anunció recientemente sus planes de imponer fuertes aranceles: del 10% a las importaciones de China y del 25% a los productos de México y Canadá. Se prevé que estas medidas, destinadas a impulsar la industria manufacturera nacional, tengan repercusiones económicas significativas.
El economista jefe de EY, Gregory Daco, advirtió que los aranceles podrían conducir a una estanflación, caracterizada por un crecimiento económico más lento y una mayor inflación. Calcula que los aranceles reducirían el PIB estadounidense en un 1,5% en 2025, al tiempo que aumentarían la inflación en un 0,4%. También podría producirse volatilidad en los mercados financieros, lo que aumentaría la presión sobre una economía que ya está lidiando con una inflación persistente.
Sin embargo, no todos los expertos comparten las preocupaciones de Daco sobre la inflación. El expresidente de la Reserva Federal de St. Louis, Jim Bullard, que ocupó el cargo durante el primer mandato de Trump, argumentó que los efectos de reducción del crecimiento de los aranceles podrían compensar cualquier impacto inflacionario.
“El detrimento a la economía mundial superaría cualquier efecto sobre los precios”, señaló Bullard, poniendo en duda la idea de que los aranceles por sí solos impulsarían la inflación.
Los tipos de interés, otra vez en tela de juicio
Las previsiones de la reunión de diciembre de 2024 de la Reserva Federal sugirieron una trayectoria cautelosa para las tasas de interés. Los mercados anticiparon que la tasa de fondos federales caería levemente al 3,9% para diciembre de 2025, en comparación con el rango objetivo actual del 4,25-4,5%.
Sin embargo, estas proyecciones parecen demasiado optimistas dadas las posibles presiones inflacionarias de la agenda económica de Trump, incluidos recortes de impuestos, aranceles y políticas de inmigración.
Los analistas financieros del Financial Times señalaron que la postura cautelosa de la Fed podría diferir de las estrategias más agresivas de reducción de tasas del Banco Central Europeo (BCE) y el Banco de Inglaterra, complicando aún más el panorama económico mundial.
Las políticas económicas de Trump, combinadas con las iniciativas de reducción de costos de Musk y Ramaswamy, pueden plantear desafíos importantes para la Reserva Federal. Si bien históricamente la Fed ha operado con una independencia sustancial, las tensiones con la Casa Blanca podrían poner a prueba esa autonomía.
Consiga un trabajo bien remunerado en la Web3 en 90 días: la hoja de ruta definitiva