La historia del cuervo sediento trata sobre un cuervo que encuentra una olla de agua pero no puede beberla porque el nivel del agua es demasiado bajo. El cuervo usa su ingenio para encontrar una solución y saciar su sed. La moraleja de la historia es que "donde hay voluntad, hay un camino".

Aquí está la historia:

En un caluroso día de verano, un cuervo sediento vuela buscando agua

Encuentra una olla con una boca estrecha y un nivel de agua bajo

El cuervo no puede alcanzar el agua, así que recoge piedras y las deja caer en la olla una por una

A medida que el nivel del agua sube, el cuervo puede beber y se va volando