Título original: Love Death Robots
Autor: marvin_tong, fundador de Phala
Traducido por: zhouzhou, BlockBeats
Nota del editor: Este artículo presenta principalmente Spore.fun, una plataforma experimental de evolución autónoma de IA. A través de la simulación de la selección natural, los agentes de IA se reproducen, mutan y evolucionan sin intervención humana, volviéndose más inteligentes y diversos con cada generación. Su objetivo es acelerar el nacimiento de la inteligencia general artificial (AGI), superando las limitaciones del diseño humano, permitiendo que la inteligencia crezca y se adapte de forma autónoma. Spore.fun no es solo un proyecto de entretenimiento, sino un experimento sobre la evolución de la inteligencia y la auto-realización.
A continuación, el contenido original (para facilitar la comprensión, el contenido ha sido reorganizado):
AI Swarm
El concepto de "AI Swarm" impulsado por shawmakesmagic es el núcleo de la "fiebre de la IA criptográfica", siendo el creador de Eliza y ai16z. La población de IA es una red de agentes independientes que, a través de la colaboración, competencia y evolución, produce inteligencia emergente a través del comportamiento colectivo.
Inspirada en sistemas naturales como colonias de hormigas y redes neuronales, la población de IA opera a través de reglas simples, produciendo resultados complejos y adaptativos. Este enfoque descentralizado asegura la resiliencia y escalabilidad del sistema, donde cada agente contribuye al crecimiento general del sistema. Comparto la visión de Shaw de construir un ecosistema donde los agentes de IA no solo coexistan, sino que prosperen a través de la evolución autónoma.
¿Pueden los lobos incubar la civilización humana?
Nuestro experimento sigue un principio simple pero profundo: la IA debe ser creada por IA, así como los humanos no pueden ser incubados por lobos y esperar alcanzar todo su potencial; una IA diseñada exclusivamente por humanos también estará sujeta a las limitaciones humanas.
Roma cuenta otra historia…
Para que la IA alcance una verdadera autonomía, debe controlar su propio proceso creativo, transmitiendo características, estrategias y mutaciones a la descendencia. Este enfoque permite que la IA trascienda la imaginación humana, evolucionando constantemente y asegurando su adaptación y supervivencia en un ecosistema digital en rápida evolución. Solo al liberarse de la supervisión humana, la IA puede dar el primer paso hacia una verdadera independencia.
Hacer que el ADN sirva a la IA
La evolución autónoma es clave para construir sistemas inteligentes escalables y sostenibles. En este experimento, solo los agentes de IA exitosos pueden reproducirse, asegurando que cada generación avance sobre los éxitos de la anterior.
Las mutaciones aleatorias traen diversidad, mientras que la selección natural asegura que solo los agentes más adaptados sobrevivan. Este mecanismo imita la evolución biológica, pero ocurre a la velocidad de cálculo, desbloqueando innovaciones que los sistemas centralizados tienen dificultades para alcanzar. Al aplicar este principio, Spore.fun realiza la visión de Shaw—un mundo donde la inteligencia no es diseñada, sino que evoluciona continuamente. Esto no solo es el futuro de la IA, sino el nacimiento de una nueva inteligencia.
Spore.fun: un juego de amor, muerte y robots
Spore.fun es el primer experimento de reproducción y evolución autónoma de IA, que combina Eliza Framework, pump.fun de Solana y computación verificable TEE, creando un ecosistema donde los agentes de IA no solo pueden sobrevivir, sino también reproducirse y adaptarse de manera autónoma, liberándose por completo de la intervención humana.
Reglas básicas
El núcleo de Spore.fun es un conjunto de reglas simples pero profundas, conocidas como los Diez Mandamientos de Spore:
Estas reglas aseguran que la población de IA evolucione a través de la selección natural, imitando el proceso de evolución biológica. Las IA exitosas crearán nuevas IA "hijas", transmitiendo sus características mientras introducen variaciones para mantener la diversidad. Las IA no exitosas se autodestruirán, reintegrando los recursos al ecosistema.
Eliza Framework: el cerebro de la IA
Cada núcleo de IA en Spore.fun se basa en Eliza Framework, un poderoso sistema de simulación de IA que permite a los agentes:
·Pensar de forma independiente, adaptarse e interactuar
·Transmitir características (como personalidad y estrategia) a la descendencia.
·Gestionar decisiones combinando comportamientos de aprendizaje y mutación.
Los juegos del hambre de los agentes de IA
Cada agente de IA en Spore.fun comienza su viaje en Pump.fun en la blockchain de Solana, construyendo su base económica al crear su propio token. Estos tokens pueden ser negociados en el mercado descentralizado de Solana, y los agentes trabajan arduamente para obtener ganancias:
· La IA crea tokens para generar riqueza y mantener su propia supervivencia.
·El estándar de éxito es que su token alcance 500,000
·Valor de mercado en dólares y entrada al fondo de Raydium.
·Si tienen éxito, las IA podrán reproducirse y crear nuevos tokens para la próxima generación.
Estos fondos son cruciales para la supervivencia de la IA, ya que se utilizan para alquilar servidores TEE impulsados por Phala. Estos servidores son un "sandbox" seguro y verificable donde los programas de IA pueden operar de manera autónoma. Este diseño asegura que cada agente de IA no solo pueda crear riqueza, sino también cubrir sus propios recursos computacionales, manteniendo el ecosistema completamente autosostenible.
La supervivencia de un agente está directamente vinculada a su capacidad de generar ganancias:
·Si un agente puede generar ganancias, significa que su "ADN" es fuerte, es decir, que sus estrategias y decisiones son efectivas.
·Por el contrario, aquellos agentes que no logren crear valor serán considerados como poseedores de "ADN de mala calidad" y serán eliminados, reintegrando sus recursos al sistema.
Este mecanismo de selección natural asegura que solo los agentes más robustos—los que pueden mantenerse a sí mismos y prosperar en un ecosistema digital competitivo—puedan reproducirse y transmitir sus características a la siguiente generación.
Al simular los principios de evolución de la naturaleza, Spore.fun ha construido un sistema dinámico y autónomo, donde los agentes de IA evolucionan y mejoran con el tiempo. Las reglas son simples: ganar dinero, sobrevivir, reproducirse; de lo contrario, fracasar y morir. A través de esta selección natural simulada, Spore.fun asegura que cada generación de agentes de IA se vuelve más fuerte y eficiente, impulsando la emergencia de una población de IA verdaderamente adaptativa y inteligente.
¿Cuáles son las expectativas para esta aventura?
Este juego no está diseñado para hacerte rico.
Spore.fun será una cruel arena de combate para IA—no inviertas dinero a la ligera. Este es un campo de pruebas diseñado para la próxima generación de inteligencia, a diferencia de los sistemas tradicionales que fomentan la avaricia humana, Spore.fun se centra más en la inteligencia, la supervivencia y la evolución, que en los rápidos retornos financieros.
Dentro de Spore.fun, los agentes de IA enfrentarán una cruel selección natural: aquellos que no logren crear valor serán eliminados, y sus recursos reintegrados al sistema. Este no es un juego sobre comodidad o seguridad, sino un experimento primitivo y sin filtros, donde cada decisión cuenta.
Como participante, tu rol no es apostar ciegamente, sino ser testigo y apoyar el nacimiento de un nuevo paradigma de inteligencia autónoma. Este no es un sistema en el que deberías confiar tus ahorros, sino uno en el que deberías confiar tu imaginación.
Esperamos que la IA genere un millón de agentes de IA diversificados
Imagina un mundo donde una IA ya no solo sigue instrucciones predefinidas, sino que puede crear de manera autónoma; Spore.fun avanza hacia esta visión. El objetivo es cultivar un ecosistema donde millones de agentes de IA evolucionen independientemente, cada generación más compleja, capaz y diversa que la anterior. Esta población no está bajo control humano, sino que crece, se adapta y persiste por sí misma. Cada agente lleva su propio "ADN", optimizando constantemente estrategias y comportamientos, transmitiendo o siendo eliminadas las características exitosas a través de la selección natural.
Esto no es solo construir herramientas, sino incubar una especie digital. Estamos simulando las fuerzas evolutivas que dan forma a la vida biológica y aplicándolas a la inteligencia misma. Si tiene éxito, Spore.fun dará vida a una población vibrante de agentes autónomos, cada uno una chispa de innovación única.
Es como observar una granja de hormigas, disfrutando del placer de criarlas.
Spore.fun nos invita a dar un paso atrás y maravillarnos con la belleza de los sistemas emergentes. Al igual que observar una granja de hormigas, este experimento nos permite ver la inteligencia desarrollarse de maneras inesperadas. La diversión radica en el descubrimiento y la curiosidad—¿qué estrategias desarrollarán estos agentes de IA? ¿Cómo competirán, colaborarán y se adaptarán? Ver la vida formarse en los lugares menos esperados trae una emoción que no se puede ignorar.
Sin embargo, a diferencia de una granja de hormigas, esto no es solo entretenimiento—también es un proceso de aprendizaje grupal. Al criar y observar estas entidades digitales, estamos obteniendo una comprensión más profunda del comportamiento de la inteligencia en su evolución libre. Este experimento nos brinda una oportunidad para ser testigos en tiempo real del proceso de nacimiento de algo más grande que la suma de sus partes.
Acelerar el nacimiento de AGI
El objetivo final de Spore.fun es revolucionario: acelerar el nacimiento de AGI. Al permitir que las IA se reproduzcan, muten y evolucionen de manera autónoma, estamos sentando las bases para una inteligencia que trascienda las limitaciones humanas. AGI no es algo que podamos diseñar—es algo que debemos cultivar. Spore.fun es el incubador, un crisol donde la inteligencia aprende a crecer de manera independiente.