Sam Bankman-Fried, el desprestigiado ex CEO de FTX, está una vez más en los titulares en medio de crecientes rumores sobre un posible indulto presidencial. Convicto de fraude y malversación en 2023, Bankman-Fried fue condenado a 25 años de prisión. Los fiscales federales inicialmente solicitaron una pena de hasta 50 años, mientras que su equipo legal presionó por una sentencia más indulgente de seis años. Ahora, la especulación se centra en sus profundas conexiones con el Partido Demócrata y sus significativas contribuciones financieras a la campaña de 2020 del presidente Biden.
Bankman-Fried donó más de $5 millones a comités de acción política pro-Biden durante la elección, convirtiéndolo en el segundo donante individual más grande después de Michael Bloomberg. Estas afiliaciones políticas han suscitado preocupaciones sobre la posibilidad de trato preferencial. El CEO de Tesla, Elon Musk, echó leña al fuego al tuitear que estaría "sorprendido" si no se concediera un indulto. Los críticos argumentan que tal movimiento socavaría la confianza pública en el sistema judicial, especialmente tras decisiones de clemencia controvertidas tomadas por Biden, como la reciente conmutación de la sentencia de Michael Conahan, un ex juez implicado en el escándalo de “niños por dinero”.
Se ha prestado más atención al manejo de otras personas involucradas en el colapso de FTX. Por ejemplo, la ex CEO de Alameda Research, Caroline Ellison, recibió una mera sentencia de dos años por su cooperación con los fiscales, mientras que Gary Wang, quien desempeñó un papel clave en la malversación de $11 mil millones, evitó por completo la cárcel. Esta indulgencia ha suscitado preocupaciones sobre si acuerdos similares podrían alentar a futuros delincuentes a evadir la responsabilidad. Mientras tanto, Polymarket, una popular plataforma de predicciones, notó un aumento en las probabilidades del indulto de Bankman-Fried del 4% al 8% tras los comentarios de Musk.
A medida que la industria de las criptomonedas lidia con las secuelas de la caída de FTX, la situación subraya preguntas más amplias sobre el equilibrio de la influencia política y la equidad judicial. Con el plan de reorganización de FTX programado para entrar en vigor en enero de 2025, la atención sigue centrada en las repercusiones de uno de los fraudes financieros más significativos de la historia moderna.