Hablando de esta caída, realmente es un buen espectáculo. Mientras aún soñamos con que, tras la elección de Trump, el bitcoin pueda "salir de la galaxia", la realidad nos dio un fuerte golpe en la cara. Como hormigas en una sartén caliente, el precio del bitcoin sube y baja, dejando a los inversores inquietos. "El bitcoin es como un niño caprichoso, su emoción cambia de un momento a otro."

No obstante, realmente no se le puede echar toda la culpa al bitcoin por su temperamento. Esta vez, el presidente de la Reserva Federal, Powell, lanzó un gran anuncio, afirmando claramente que el bitcoin reemplazando al dólar es "una ilusión de locos". En cuanto se dijo esto, fue como lanzar un trozo de hielo en agua hirviendo; el mercado se enfrió instantáneamente. El economista jefe de JPMorgan incluso añadió: "El valor del bitcoin es como un castillo en el aire, parece hermoso, pero no se sostiene."